Uno nunca puede imaginarse lo que saldrá del caldero mágico de un hechicero. Tanto podría tratarse de algo tremendamente horrible, como de algo especialmente agradable. De todos modos creo es mejor no confiar nunca en un mago. Aunque en este caso, podemos ser un poco más permisivos, o al menos mirar el vídeo para ver que es lo que nos depara el caldero de este mago.
Aunque a primera vista pueda parecer que este chico está preparando alguna especie de hechizo mágico (maléfico o benévolo), lo que finalmente saldrá de su caldero es algo muy dulce. Se trata de un dulce que suele gustar a la mayoría de la gente. Entre la que me incluyo yo misma.


Fuente: youtube
Creo que este chico y yo haríamos un buen equipo. El podría bailar y preparar el algodón dulce igual que hasta ahora, sólo que en vez de ir enrollándolo en el palo, yo lo iría recogiendo desde la distancia con mi boca. ¿Crees que le parecería buena idea? A mi me parece buena idea, ¿no?