Cada cultura, país e incluso algunas ciudades o pueblos tienen sus propias leyendas urbanas, algunas más aterradoras que otras, claro está.
Hoy te vamos a contar un total de trece aterradoras leyendas urbanas que provienen de Japón y que además no son muy conocidas, pero aún así pueden estar fuertemente arraigadas en la cultura del país. Es curioso fijarse en las leyendas urbanas de otros países y culturas, ya que estas leyendas, nos cuentan que es lo que pasa más allá de nuestras fronteras.
Espero que leas estas historias cuando falten el máximo de horas posible para irte a la cama a dormir o tengas cierta facilidad para olvidar aquello que lees, porque si no, esta noche no vas a poder dormir al recordar estas leyendas urbanas japonesas.
1. Jinmenken: Estos espíritus son perros con rostros humanos que salen corriendo rápidamente para evitar seer vistos. Ellos pueden hablar, pero por lo general sólo hablan para decir que los dejen solos.

2. El infierno de Tomino: Hay un poema llamado «infierno de Tomino» escrito alrededor de principios de 1900 que habla sobre el descenso de un niño en el mundo terrenal. Se dice que si se lee el poema en voz alta, el lector morirá.

3. Hanako-san: Esta es una famosa leyenda en todas las escuelas primarias de Japón. Trata de una chica joven que una vez se suicidó en el cuatro de baño, y supuestamente todavía permanece allí.

4. Aka Manto: Este es otro fantasma de lababo, aunque este caso, de viviendas. A las víctimas se les ofreces la posibilidad de elegir entre el papel higiénico de color rojo o el azul. Los que responder roojo, mueren desangrados, los que eligen azul estrangulados.

5. Pueblo Inunaki: Nadie sabe si realmente existe, pero la leyenda dice que Inunaki es un pueblo aislado donde no existen las leyes y la anarquía suprema reina en el lugar. Todo el mundo es libre de robar, matar, e incluso comerte a otras personas. Todos los que van, no vuelven.

6. Kuchisake-Onn: Este demonio es conocida como «la mujer con la cara dividida», y se dice que usa una máscara quirúrgica y pregunta a los extraños si ella es bonita. Al responder «no», ella te mataría, al responder no, ella se quita la máscara y pregunta de nuevo. Si su respuesta es no, te mata. Si dice que sí, te raja la boca para que te parezcas a ella.

7. Gozu: Pocos saben la antigua historia de Gozu, el cabeza de buey, pero corre el rumor de que la historia es tan aterradora que simplemente contándola, el miedo que produce causa convulsiones hasta que el oyente muere de miedo.

8. La Muchacha En La Brecha: Una superstición japonesa sostiene que este espíritu vive entre los huecos de nuestras viviendas, entre muebles y puertas ligeramente abiertas. Si miras a los ojos de la chica en la brecha, instantáneamente serás enviado al infierno.

9. Kune Kune: El espíritu kune kune se ve a menudo en los campos. La aparición adquiere una forma de niebla blanca que se mueve de forma similar a un gusano. Si tocas la kune kune, la persona enloquece.

10. Teke Teke: La leyenda de Teke Teke dice que una mujer fue partida por la mitad por un tren en circulación y ahora se arrastra por la ciudad con una guadaña, con la que corta por la mitad y las convierte en Teke Tekes.

11. Hitobashira: Esta era una antigua práctica que consistía en poner a seres humanos dentro de los pilares. La gente creía que esto de alguna lo hacía más fuerte. A día de hoy, se cuenta que los edificios con pilares son recorridos por los seres que están contenidos dentro de ellos.

12. Noppera Bo: Los seres Noppera Bo (o seres «sin rostro») engañan a las personas para hacerse amigas suyas con la finalidad de robar su apariencia.

13. El Okiku: Este muñeco lleva el nombre de un niño de 2 años que murió trágicamente. La familia rezó a diario hasta que un día, el pelo del muñeco empezó a crecer. Los científicos llegaron a la conclusión de que el cabello es humano, pero no tienen una explicación más allá de eso.

Creo que he tenido suficiente por hoy, voy mirar alguna publicación de perros o gatos que me entretenga hasta la hora de dormir. Esta noche me acostaré tarde, lo veo a venir… ¡Hola pesadillas!